Segunda variedad más plantada en España con aproximadamente 99.355 hectáreas, si bien aquí hemos unido la garnacha tinta (59.260 has.) y la mal llamada garnacha tintorera (40.095 has.), a la primera se la conoce también como navarro, lladoner y tinto aragonés y la segunda realmente es una alicante o negral ya que sus orígenes son confusos, pero queda claro que no tiene más de un 50% de garnacha.
Ambas tienen buena fertilidad, de racimos abundantes en la floración pero muy sensible al corrimiento, de maduración tardía y la segunda con necesidad de muchas horas de sol al año.
Enológicamente la garnacha tinta puede ser considerada la cenicienta de los vinos, podemos tener elegancia o simpleza, la clave es saber trabajarla bien.
La tintorera tiene un alto contenido en compuestos fenólicos y ambas con alto contenido en alcohol, es una variedad ideal para mezclar con otros vinos tintos.
Nuestra selección de garnachas pasa por las que entendemos son de mayor potencial cualitativo y tipicidad, garnachas mediterráneas, más cálidas y garnachas atlánticas, más tensas y sofisticadas. Todas ecológicas y premium.